Nunca es tarde cuando la dicha es buena

Home / Blog / Nunca es tarde cuando la dicha es buena
Nunca es tarde cuando la dicha es buena

Nunca es tarde cuando la dicha es buena

A sus 87, mi madre toco un pincel por primera vez y sintió su efecto. El cambio en su actitud fue inmediato, alegría, nuevo reto, sentirse capaz y lograrlo aún hoy, después de unas semanas, sigue siendo su tema de conversación más recurrente.
Les invito a dar este regalo que alegra el alma.